Preparación
Es preferible cocer los garbanzos en casa, pero un bote de garbanzos precocidos es una buena solución si no hay mucho tiempo. En ese caso, lavamos bien los garbanzos en un colador bajo el grifo, para eliminar los posibles conservantes. Escurrimos bien y los colocamos en una fuente honda.
Pelamos el pepino y lo lavamos junto con el tomate, la zanahoria. Cortamos los ingredientes aproximadamente del tamaño de los garbanzos. De este modo conseguiremos un plato colorido. Añadimos también unos pepinillos en vinagre, para darle un toque más ácido.
Lavaremos un trozo de cebolla al gusto y la picamos finamente. Lo mezclamos todo bien con los garbanzos cocidos y las hojas de lechuga que hemos preparado previamente.
Salpimentamos y aliñamos con aceite de oliva y vinagre o nuestra vinagreta favorita.